Día 32: María, nuestra abogada, ahora y en la hora de nuestra muerte
«Los que se consagran a María no tienen nada que temer, pues ella es la fiel abogada en la hora de la muerte».
-San Luis de Montfort
Génesis 3:15
«Pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu descendencia y la descendencia de ella; él te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el talón».
Virtud de hoy:
Humildad y perseverancia final
Refúgiate bajo el manto de María en los momentos de prueba y pídele que te obtenga la gracia de una muerte feliz en la última batalla de la vida.
Por favor, recen la Letanía de Lareto.